Finalizada la primera mitad del año, para Inflación_Verdadera la inflación anual se
ubica en 39,792%, retrocediendo por primera vez desde septiembre último.
Mientras que el INDEC al publicar el IPCNU, dice que la variación del
índice es de 1,3% mensual, por lo que acumula 15% en lo que va del año. De
continuar a este ritmo, a diciembre nos encontraríamos con una inflación anual del
24,3%. Si nos basamos en los datos publicados en los meses anteriores, y si la
canasta de bienes medida fuese la misma, diríamos que la inflación anual que
debería anunciar el organismo oficial sería de 21,701% (ésta es la serie
graficada más abajo).
El IPCDR desciende un poco más y se ubica en 29,133% anual. Los mayores
aumentos entre jun-14 y jun-13 los he registrado en Verdulería (90,87%),
Carnicería (72,48%) y Fiambrería (59,64%).
A continuación muestro las series comparadas desde dic-11, se observa
cómo a partir de mayo pasado el IPCDR se despega de la estimación oficial y se
acerca a las alternativas. Aunque en los últimos meses finaliza en una posición
intermedia.
En cuanto a la canasta básica de alimentos (CBA), la medición propia
muestra también un incremento significativo, de un 46,44% respecto a junio del
año anterior. (Azul: CBADR, Rojo: INDEC, Verde: IBP o índice barrial de precios
del Cippes empalmado con
las series del Defensor del Pueblo de Córdoba).
Los mayores aumentos anuales los he registrado en los rubros Hortalizas
(130%), Papa (113%) y Frutas (95%). La CBA de un adulto ascendió a $716,37 por
lo que aumentó en 9,13% en el último mes, es decir que una familia compuesta
por un matrimonio tradicional y dos hijos necesitó $2213,57 en junio último
para no ser pobre ($17,85 por día por persona).
Aunque es la variación de precios más importante en un semestre, tanto
en la medición oficial como en la propia, desde que mido el IPCDR, la inflación
continúa siendo moderada, no así en algunos rubros alimentarios importantes.
Ciertamente, y en consonancia con las estimaciones oficiales, el ritmo de
crecimiento de los precios se viene atenuando mes a mes, en un entorno de
política monetaria recesiva. Luego de la devaluación y fijadas las pautas salariales importantes sólo resta ver en qué medida terminan pagando este costo los trabajadores. Si el gobierno nada hace contra el poder de los oligopolios, ahora ellos tienen la pelota en el juego del sistema capitalista.